La alta demanda de proyectos sustentables en países de América Latina son un ejemplo del crecimiento que está teniendo el continente. Si bien existen países que tienen el capital para ejercer esos proyectos. Hay otros que buscan la manera de ser financiados para poder llevar lo renovable a sus habitantes.

En este caso, ha surgido un gran interés por parte de algunos países por comenzaron la emisión de bonos verdes. Con la finalidad de apoyar el cuidado del medio ambiente y el crecimiento de la economía dentro de América Latina.

La inversión en bonos verdes tuvo un tropiezo en años pasados que dejaron al continente rezagado. Ahora, algunos países como México, Argentina y Guatemala (CMI Capital) levantaron la mano para comenzar la emisión de bonos verdes. Se dice que apostarle a un proyecto de energía sustentable puede ser algo seguro y rentable.

El primer país que comenzó con la emisión de bonos verdes en Latinoamérica fue Chile, quienes emitieron bonos verdes denominados en euros y dólares, alcanzando rendimientos bajos. Esto ayudo a que muchos empresarios voltearán a ver este país y se interesarán en conocer más sobre ellos.

Sabemos que los bonos verdes todavía no alcanzan el potencial como en Europa o Estados Unidos. Y para que esto suceda, se deben establecer bien ciertos parámetros para poder llegar a cierto nivel. En estos casos, los más interesados en emitir bonos verdes son los bancos ya que tienen la cartera y el capital para brindarlos, pero se detienen porque les gusta diversificar su base de inversionistas.

En América Latina se necesita aumentar la cantidad de emisores para llevarlos al mercado. Aunque también se toma en cuenta que si es difícil llegar a un mercado no ecológico, será más difícil el camino si se quiere llegar a uno verde. Hasta el momento hay mucho camino por recorrer.